Una discusión por un trabajo de uñas esculpidas terminó con un hombre muerto en Buenos Aires

Buscan a un hombre que asesinó a otro durante una discusión por un trabajo de uñas esculpidas en la ciudad de Zárate, en Buenos Aires. Este jueves la Justicia ordenó la captura internacional del acusado.

El crimen de Raúl Alfredo Castañada, de 34 años, ocurrió el martes pasado Tanto la hijastra María Milagros Torres (23), quien también resultó herida en una mano, como su hermana coincidieron en el que Carlos Alfredo Beltrán (50), remató a la víctima una vez que esta ya estaba baleada en el piso.

Según informaron voceros judiciales, la autoría del crimen por parte del sospechoso prófugo está “probada” por la declaración de Torres, quien lo señaló como el autor de los disparos, además de la declaración de otros testigos presenciales del crimen.

Una pelea por uñas esculpidas

El hecho ocurrió el último martes, alrededor de las 23.30, en las calles Rafael Pividal y Pacheco donde se originó una pelea entre Torres (23) y una menor de edad a raíz de un trabajo de uñas esculpidas que una le hizo a la otra y no había sido abonado.

Según las fuentes, en el lugar también se encontraba el padrastro de Torres, Castañeda, y un abuelo de la menor de edad, Beltrán, quienes intervinieron en la discusión que mantenían las dos mujeres.

En esas circunstancias, Castañeda habría sido atacado con un arma calibre 22 por Beltrán, y resultó herido en el tórax, en la pierna izquierda y en el muslo derecho, informó Télam.

A su vez, Torres fue alcanzada por un balazo en uno de sus brazos, tras lo cual, ella y su padrastro fueron trasladados de urgencia al hospital Zonal General de Agudos descentralizado Virgen del Carmen, de Zárate, donde el hombre murió a raíz de las heridas sufridas, mientras que la joven fue dada de alta tras recibir asistencia.

En tanto, Beltrán escapó de la escena del crimen y tampoco fue hallado en su domicilio, por lo que se encuentra prófugo de la Justicia.

Este mediodía y en diálogo con C5N, la hermana de la víctima contó que su sobrina, Torres, trabajaba en conjunto con una chica menor de edad haciendo trenzas y uñas esculpidas y que el problema surgió por un dinero, unos 2.500 pesos, que Torres le reclamó a la adolescente.

Mientras que la propia Torres contó, a su turno, cómo fue la mecánica del hecho que terminó con su padrastro asesinado. “Yo no tuve nada que ver, teníamos un emprendimiento las dos, y ella se había quedado con plata y todo eso llevó a esto, queremos Justicia y nada más”, finalizó Torres.

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